6º Nominado. Los cinco minutos

POST: Los cinco minutos
AUTOR: Javier Varea (Madrid) del blog La Mirada Crítica
NOMINADO POR: Yolanda García del blog Una madrileña
MOTIVOS: Me gustan los post que Javier le dedica a su hija y en este nos habla de como el ritmo de vida nos obliga a disfrutar mucho con el poco tiempo que le podemos dedicar a los que queremos, de la misma forma que en la época a la que nos transporta la canción de Víctor Jara, eran la pobreza y la ignorancia las que obligaban a disfrutar mucho con casi nada.


---------------------------------------------------------------------------------------------
Como aquella preciosa y mítica canción de Victor Jara, la vida a veces la vive uno como realmente quiere sólo durante "cinco minutos" del largo día. En la cancíón es Amanda quien disfruta de su profundo amor "sólo" durante cinco minutos, el tiempo que dura el descanso de la fábrica donde trabaja su amor, Manuel. "son cinco minutos, la vida es eterna en cinco minutos, suena la sirena, de vuelta al trabajo y tú caminando lo iluminas todo, los cinco minutos te hacen florecer. Te recuerdo Amanda, la calle mojada, corriendo a la fábrica donde trabajaba Manuel. La sonrisa ancha, la lluvia en el pelo, no impotaba nada, ibas a encontrarte con él...".
Muchos días, esos cinco minutos son los que tengo para ver a mi niña, para disfrutar del momento más bonito del día. A veces con rabietas, otras con fiebre y muchas otras de canciones, de juegos, de sorpresas, de gusanitos... ¡qué tendrán los dichosos gusanitos! Los abrazos que cortan la respiración, como los de Pedro Guerra, los besos tristes de despedida, como los de Ismael Serrano, las declaraciones intensas de amor con simples "te quiero muchísimo", como los de Silvio Rodríguez, o los divertidos paseos a caballito con canciones de los lunnis o los twennies, que tiene que haber de todo. Al final del día de no se cuántas horas despierto, sólo me acuerdo de esos cinco minutos que esprimes hasta el máximo, para que las siguientes no se cuántas horas que quedan hasta volver a ver a mi niña pasen cuanto antes.
Ojalá fueran más de cinco minutos, mientras tanto nos conformaremos con el tiempo que esta maldita forma de vida tan avanzada y tan civilizada que tenemos nos deja tener para nosotros mismos... y si puede ser, que esos cinco minutos sean con música.